martes, 9 de diciembre de 2008

José Ortega y Gasset


José Ortega y Gasset
(1883-1955)

-Biografía:

José Ortega y Gasset, el segundo de cuatro hermanos, nació en Madrid el 9 de mayo de 1883. Su padre, José Ortega y Munilla, aunque autor de varias novelas de asunto preferentemente social y de corte realista fue, ante todo, periodista. Como tal fue redactor de "La Iberia", el periódico de Sagasta, creador de la revista literaria "La Linterna" y director del periódico "El Imparcial", del que era propietaria la familia de su madre, Dolores Gasset, que pertenecía a la burguesía liberal e ilustrada de finales del siglo XIX. La tradición liberal y la actividad periodística de su familia marcarán la futura actividad de Ortega, tanto en su participación en la vida política española, como en su actividad periodística con la publicación de numerosos artículos de prensa, culturales y políticos. Por lo demás, el estilo periodístico puede reconocerse también en las obras más técnicas y filosóficas de Ortega.

Luego de haber realizado sus primeros estudios en Madrid, Ortega se trasladará a Málaga, en 1891, para comenzar los estudios de Bachillerato en el colegio de los jesuitas de Miraflores del Palo, donde entrará en contacto con otros jóvenes de la burguesía malagueña. Terminados sus estudios, en 1897, se trasladará a Deusto, para comenzar sus estudios universitarios, en 1898, estudios que continuará, poco después, en la Universidad de Madrid. Son los años de la guerra hispano-norteamericana, y de la consiguiente pérdida de las colonias (Cuba, Filipinas y Puerto Rico) que marcarán, como se sabe, la conciencia política y cultural de buena parte de los intelectuales españoles, elevando el tema de la decadencia de España al primer plano de la reflexión, así como el de la necesidad de una regeneración.

En 1902 obtiene la licenciatura en Filosofía, defendiendo su tesis doctoral dos años después, también en la Universidad de Madrid. En 1905 viajará a Alemania para completar su formación, siguiendo la tradición de la época o buscando las fuentes de la futura regeneración de España en la asimilación del pensamiento europeo. Así, visitará las universidades de Leipzig, Berlín y Marburgo, donde entrará en contacto con los neokantianos H. Cohen y P. Natorp, en 1906, asistiendo a sus cursos, ejerciendo ambos una gran influencia en su pensamiento, aunque Ortega no se limitará a aceptar los principios del neokantismo sin más, sino que adoptará una actitud crítica y constructiva ante ellos. En 1908 regresa a Madrid y, luego de una breve actividad docente en la Escuela de Magisterio obtiene, por concurso, la cátedra de Metafísica de la Universidad de Madrid en 1910, hasta entonces ocupada por Nicolás Salmerón, sin haber llegado a publicar todavía ninguna obra. Ese mismo año contraerá matrimonio con Rosa Spottorno y Topete.

Tras otro viaje a Alemania, en 1911, comenzará su incansable actividad pública, intentando llevar a la práctica sus ideas regeneracionistas. Así, en 1914, año en que comienza la primera guerra mundial, fundará la "Liga de Educación Política Española"; en 1915 la revista "España"; y en 1916 será cofundador del diario "El Sol". Al mismo tiempo comienza la publicación de sus primeras obras, como las "Meditaciones del Quijote", (en 1914), "El Espectador", (en 1916), iniciando el período perspectivista de su filosofía, que predominará en su obra hasta 1923.

En 1923 se instaura en España la dictadura de Primo de Rivera. Ese año fundará la "Revista de Occidente", de marcada oposición política la dictadura, oposición que le llevará, en 1929, a dimitir de su cátedra en la Universidad de Madrid, continuando sus actividades filosóficas en lugares no vinculados anteriormente a la filosofía, como la Sala Rex y el Teatro Infanta Beatriz (actualmente el conocido restaurante Teatriz), impartiendo clases a modo de conferencia, algunas de las cuales serán recogidas posteriormente en su obra "¿Qué es filosofía?", y cuyos contenidos corresponden ya al período racio-vitalista de su pensamiento, iniciado en 1923.

En 1930 volverá a la cátedra de la Complutense, bajo la dictadura de Berenguer, más tolerante que la de Primo de Rivera, continuando, no obstante, su actividad pública. Ese mismo año publicará "La rebelión de las masas". En 1931, junto con otros intelectuales entre los que se contaban Gregorio Marañón y Pérez de Ayala, fundará la "Agrupación al Servicio de la República" y será elegido diputado a las Cortes Constituyentes de la recién proclamada II República por la provincia de León. Luego de su experiencia parlamentaria retornará a la actividad académica publicando, en 1934, "En torno a Galileo", y en 1935 "Historia como sistema", siendo homenajeado ese mismo año por la Universidad de Madrid.

A raíz del golpe de estado de 1936 contra la II República, que dará lugar a la guerra civil española, Ortega se autoexilia, estableciendo su residencia primero en París, y luego en Holanda y Argentina, hasta 1942, año en que establecerá su residencia en Portugal. Al finalizar la segunda guerra mundial regresará a España, en 1945 y, aunque se le autoriza un ciclo de conferencias en el Ateneo de Madrid, no se le permite recuperar su cátedra de Metafísica, ante lo cual funda, en 1948, el "Instituto de Humanidades", donde vuelve a impartir docencia ante un público no universitario. En 1950 realiza un último viaje a Alemania, decepcionado ante las dificultades de su estancia en España, siendo nombrado en 1951 Doctor Honoris Causa por las universidades de Marburgo y Glasgow. Regresará a España en 1955, muriendo en Madrid el 18 de octubre de ese mismo año.

Sus obras:

-1914 Meditaciones del Quijote • Vieja y nueva política
-1915 Investigaciones psicológicas (Curso explicado entre 1915-16 y publicado en 1982)
-1916 Personas, Obras, Cosas (artículos y ensayos escritos entre 1904 y 1912: «Renan», «Adán en el Paraíso», «La pedagogía social como programa político», «Problemas culturales», &c.)
-1916-1934 El Espectador (8 tomos publicados entre 1916 y 1934)
-1921 España Invertebrada
-1923 El tema de nuestro tiempo
-1924 Las Atlántidas
-1925 La deshumanización del Arte e Ideas sobre la novela
-1927 Espíritu de la letra • Mirabeau o el político
-1928-1929 ¿Qué es filosofía? (curso publicado póstumamente en 1957), Kant
-1929-1931 ¿Qué es conocimiento? (Publicado en 1984, recoge tres cursos explicados en 1929,1930 y 1931, titulados, respectivamente: «Vida como ejecución (El ser ejecutivo)», «Sobre la realidad radical» y «¿Qué es la vida?»)
-1930 La rebelión de las masas • Misión de la Universidad
-1931 Rectificación de la República; La redención de las provincias y la decencia nacional
-1932 Goethe desde dentro • Unas lecciones de metafísica (curso dado entre 1932-33 y publicado en 1966)
-1933-34 En torno a Galileo (curso explicado en 1933 del que se publicaron algunas lecciones en -1942 bajo el título Esquema de las crisis)
-1934 «Prólogo para alemanes» (prólogo a la tercera edición alemana de El tema de nuestro tiempo. El propio Ortega prohibió su publicación «por los sucesos de Munich de 1934». Finalmente se publicó en español en 1958.)
-1935 Historia como sistema (1ª edición en inglés. La versión española es de 1941 e incluye su ensayo sobre «El Imperio romano»).
-1939 Ensimismamiento y alteración. Meditación de la técnica
-1940 Ideas y Crencias, • Sobre la razón histórica (curso explicado en Buenos Aires y publicado en 1979 junto a otro dado en Lisboa sobre el mismo asunto.)
-1942 Teoría de Andalucía y otros ensayos • Guillermo Dilthey y la Idea de vida
-1944 Sobre la razón histórica (curso dado en Lisboa, vid. supra)
-1946 Idea del Teatro. Una abreviatura (conferencia dada en Lisboa, abril, y en Madrid, mayo; publicada en 1958, aunque en el núm. 62 de la Revista Nacional de educación ofreció una versión de la pronunciada en Madrid.)
-1947 La Idea de principio en Leibniz y la evolución de la teoría deductiva (publicado en 1958)
-1948 Una interpretación de la Historia Universal. En torno a Toynbee (publicado en 1960)
-1949 Meditación de Europa (conferencia pronunciada en Berlín en 1949 con el título: De Europa meditatio quaedam. Se publica en 1960 junto a otros textos inéditos afines).
-1949-1950 El hombre y la gente (curso explicado en 1949-1950 en el Instituto de Humanidades; se publica en 1957)
-1950 Papeles sobre Velázquez y Goya
-1951-1954 Pasado y porvenir para el hombre actual (título publicado en 1962 que reúne una serie de conferencias que Ortega pronunció en Alemania, Suiza e Inglaterra y se publicarán junto a un «Comentario al Banquete» de Platón.)
Otros póstumos: Goya (1958), Velázquez (1959), Origen y epílogo de la Filosofía (1960), La caza y los toros (1960), Vives-Goethe (1961)

-Su filosofía:

En su obra titulada "¿Qué es filosofía?" define esta disciplina como “el estudio radical de la totalidad del Universo”, y presenta algunos rasgos principales que, a su vez, permiten aclarar la definición citada.
a) Principio de autonomía: siguiendo a Descartes, Ortega mantiene que el filósofo no puede tomar prestadas las verdades conquistadas por otros saberes; al menos en lo relativo a las fundamentos de la investigación filosófica, debe admitir como verdadero sólo aquello que se le muestre a él mismo con evidencia. Y es precisamente este afán por la autonomía de la filosofía lo que llevará a nuestro filósofo a la búsqueda de un dato que presente evidencia absoluta, de una realidad primera y radical (el vivir) y le conducirá a cuestionar las creencias más elementales desde el punto de vista de la actitud natural, de la actitud espontánea que fluye en la vida.
b) Principio de pantonomía o universalismo: las ciencias (biología, física, química...) se interesan cada una de ellas por una parte de la realidad; la filosofía, sin embargo, lo hace por el todo, por el Universo en general, siendo éste la suma de “todo cuanto hay”, el conjunto de todas las cosas, tanto las existentes como las meramente pensadas, imaginadas o deseadas. Podría objetarse que al filósofo también le interesa la ética, la estética, la teoría del conocimiento, la antropología, y que para su estudio estas disciplinas acotan una parte de la realidad. Sin embargo, en cada uno de estas investigaciones “particulares”, el filósofo hace una valoración de la región del ser que le interesa (lo moral, lo bello, la verdad, el ser humano) y las estudia en relación con el conjunto de la realidad, con la totalidad; en este enmarcar una realidad particular en el conjunto en el que se inscribe, la filosofía descubre el sentido de las cosas, el ser presente en todas ellas. Esto quiere decir que para Ortega y Gasset la filosofía es lo que tradicionalmente se identifica con la ontología: el estudio del ser, en qué consiste el ser y las categorías principales del ser.
c) La filosofía es un conocimiento teórico: por ser conocimiento es un sistema de conceptos precisos, basados en el ejercicio de la razón y disciplinado mediante la fidelidad a la lógica y a las reglas de la argumentación (Ortega está en contra del misticismo), y por ser teórico es un saber ajeno a la preocupación por el domino técnico del mundo pues la filosofía no da reglas concretas para la transformación de la realidad y la construcción de objetos. Sin embargo, no hay que creer que esta “inutilidad” de la filosofía la haga poco importante; antes al contrario; Ortega presenta dos razones que convierten a la filosofía en un saber imprescindible: por un lado, intenta satisfacer una de las dimensiones más importantes e irrenunciables de la vida humana, como es el afán por el conocimiento, la búsqueda de la verdad sobre el mundo; además, la filosofía tiene lo que podríamos llamar “utilidad existencial”: como indica con frecuencia, el hombre es un náufrago perdido en la existencia y en este naufragio las teorías, particularmente las filosóficas, le permiten orientarse en la realidad.

-Aplicaciones actuales a su filosifía:

Razón y Vida. La vida concreta de cada uno, dada en el tiempo, sin apoyos que trasciendan su realidad, sin una guía preestablecida por nada ni nadie, es naufragio. Estamos anclados en nuestro tiempo y lugar, en una circunstancia, que a modo de perspectiva, nos hace contemplar el mundo, la realidad, de un modo concreto y limitado, pero a la vez insustituible y válido. Sin embargo, junto con esta dimensión de lo temporal, concreto y frágil, que le acerca tanto a Nietzsche, Ortega encuentra también la llamada de la razón, con su reclamación de objetividad y universalidad, a la que tampoco quiere renunciar. Y así, en inestable equilibrio, reivindica también su ejercicio, pero no el de la razón que caracterizó a la filosofía moderna, matematizante, abstracta e impersonal, sino de otra, la razón vital, que pueda también acoger la vida. Y acogerla tanto por referirse expresamente a ella para hacerla transparante -la razón histórica- como por aplicarse la razón a lo que también es ingrediente del vivir, la Naturaleza y la Realidad en su conjunto, y en ese afanarse, dirá Ortega y Gasset, ofrecer sus logros de la ciencia y la cultura.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Kant


biografía:

Immanuel Kant nació en 1724 y murió en 1804, filósofo alemán, considerado por muchos como el pensador más influyente de la era moderna.
Nacido en Königsberg (ahora, Kaliningrado, Rusia) el 22 de abril de 1724, Kant se educó en el Collegium Fredericianum y en la Universidad de Königsberg. En la escuela estudió sobre todo a los clásicos y en la universidad, física y matemáticas. Tras la muerte de su padre, tuvo que abandonar sus estudios universitarios y ganarse la vida como tutor privado. En 1755, ayudado por un amigo, reanudó sus estudios y obtuvo el doctorado. Después, enseñó en la universidad durante 15 años, y dio conferencias primero de ciencia y matemáticas, para llegar de forma paulatina a disertar sobre casi todas las ramas de la filosofía.
Aunque las conferencias y escritos de Kant durante este periodo le dieron reputación como filósofo original, no se le concedió una cátedra en la universidad hasta 1770, cuando se le designó profesor de lógica y metafísica. Durante los 27 años siguientes continuó dedicado a su labor profesoral y atrayendo a un gran número de estudiantes a Königsberg. Las enseñanzas religiosas nada ortodoxas de Kant, que se basaban más en el racionalismo que en la revelación divina, le crearon problemas con el Gobierno de Prusia y en 1792 Federico Guillermo II, rey de esa nación, le prohibió impartir clases o escribir sobre asuntos religiosos. Kant obedeció esta orden durante cinco años, hasta la muerte del rey, y entonces se sintió liberado de su obligación. En 1798, ya retirado de la docencia universitaria, publicó un epítome donde se contenía una expresión de sus ideas de materia religiosa. Murió el 12 de febrero de 1804.


Su filosofía:

filosofía crítica, está recogida en su Crítica de la razón pura (1781), en la que examinó las bases del conocimiento humano y creó una epistemología individual. Al igual que los primeros filósofos, Kant diferenciaba los modos de pensar en proposiciones analíticas y sintéticas. Una proposición analítica es aquella en la que el predicado está contenido en el sujeto, como en la afirmación 'las casas negras son casas'. La verdad de este tipo de proposiciones es evidente, porque afirmar lo contrario supondría plantear una proposición contradictoria. Tales proposiciones son llamadas analíticas porque la verdad se descubre por el análisis del concepto en sí mismo. Las proposiciones sintéticas, en cambio, son aquellas a las que no se puede llegar por análisis puro, como en la expresión 'la casa es negra'. Todas las proposiciones comunes que resultan de la experiencia del mundo son sintéticas.
Las proposiciones, según Kant, pueden ser divididas también en otros dos tipos: empírica, o a posteriori, y a priori. Las proposiciones empíricas dependen tan sólo de la percepción, pero las proposiciones a priori tienen una validez esencial y no se basan en tal percepción. La diferencia entre estos dos tipos de proposiciones puede ser ilustrada por la empírica 'la casa es negra' y la a priori 'dos más dos son cuatro'. La tesis de Kant en la Crítica consiste en que resulta posible formular juicios sintéticos a priori. Esta posición filosófica es conocida como transcendentalismo. Al explicar cómo es posible este tipo de juicios, Kant consideraba los objetos del mundo material como incognoscibles en esencia; desde el punto de vista de la razón, sirven tan sólo como materia pura a partir de la cual se nutren las sensaciones. Los objetos, en sí mismos, no tienen existencia, y el espacio y el tiempo pertenecen a la realidad sólo como parte de la mente, como intuiciones con las que las percepciones son medidas y valorada.


Sus obras mas importantes son; se dividen en dos grupos:


El precrítico:

Pensamientos sobre el verdadero valor de las fuerzas vivas" ç

De igne" ("Sobre el fuego", presentada como tesis doctoral)

Historia natural general y teoría del cielo"


El crítico:

"Crítica de la razón pura"
"Prolegómenos a toda metafísica futura"
"Fundamentación de la metafísica de las costumbres"
"Sobre los volcanes de la luna"



Su filosofia aplicada a la actualidad:


Kant ha tenido mayor influencia que ningún otro filósofo de la era moderna. La filosofía kantiana, y en especial como la desarrolló el filósofo alemán Georg Wilhelm Friedrich Hegel, estableció los cimientos sobre los que se edificó la estructura básica del pensamiento de Karl Marx. El método dialéctico, utilizado tanto por Hegel como por Karl Marx, fue un desarrollo del método de razonamiento articulado por antinomias que Kant aplicó.

Hume


biografía:

David Hume nació en Edimburgo el 26 de abril de 1711, siendo el hijo menor de una buena familia, pero modesta económicamente. Su padre murió siendo él un niño, por lo que vivió con su hermano y su hermana bajo el cuidado de su madre.
Su familia quiso que estudiara derecho, carrera que no fue tenida en gran estima por el joven Hume, que ya desde muy temprano "sentía una insuperable aversión hacia todo aquello que no fueran las tareas de la filosofía y el conocimiento en general".
En 1734 marcha a Bristol, dedicándose a la abogacía, profesión que deja al cabo de pocos meses, cuando decide retirarse a Francia (Reims y Anjou) para dedicarse a su mayor pasión, "la literatura". En este retiro compuso su obra Treatise of Human Nature, que publicó en Londres en 1738. Dicha obra tuvo muy escasa acogida: "nació muerta de la imprenta, sin recibir, por lo menos, la distinción de suscitar un murmullo entre los fanáticos".Al poco regresa a Escocia, y va a vivir con su madre y su hermano a una casa de campo, dedicándose por entero a la redacción de sus Essays Moral and Political, que se publicaron en 1742 y tuvieron una mayor acogida que la obra anterior.En aquel tiempo se dedicó al estudio del griego y en 1745 optó por la cátedra de ética y filosofía de la Universidad de Edimburgo, plaza que le fue negada por su reputación de "ateo" y "escéptico".El mismo año, a ruegos del marques de Annandale, marchó a Inglaterra como su instructor y más tarde con el general St. Clair como secretario suyo, volviendo en 1749, donde vivió con su hermano durante dos años, hasta que éste se casó. Su madre había muerto hacía poco tiempo.En este tiempo redactó una revisión y condensación de la primera parte del "Treatise" en una obra que se publicó en 1751 bajo el título "Enquiry concerning human understanding " y publicó también otra obra titulada "An Enquiry concerning the principles of morals ", donde refundía la tercera parte del Tratado y que según el autor, era el mejor de todos sus escritos. En 1752 publicó sus "Political discourses " (" la única de mis obras que alcanzó el éxito en la primera publicación").En 1751 abandonó la casa de su hermano y se mudó a la ciudad a vivir con su hermana. Un año después, la facultad de Abogados le nombra bibliotecario, trabajo con el cual puede apenas subsistir pero que puso a su disposición una vasta biblioteca.Empieza entonces a redactar una obra sobre la historia de Inglaterra, empezando en 1756 con la llegada de la Casa de Estuardo, a la que siguió un segundo volumen de la historia de Inglaterra hasta el período de la revolución de 1688.La primera parte fue duramente atacada por distintos sectores ideológicos. En el intervalo entre ambas obras escribe su "Natural history of religion ". En el 1759 publica "History of the House of Tudor ", obra que causa indignación, por lo que se retira a Edimburgo para acabar la primera parte de la English History que se da al público en 1761, ( "con un tolerable y nada más que tolerable éxito"). Tenía Hume cincuenta años cuando recibió una invitación para trabajar como secretario del Earl of Hertford, embajador británico en París, lugar en el que entró en contacto con los ilustrados franceses, entablando amistad con Rousseau, que le acompañaría a Londres a su vuelta.En 1967 es reclamado por Mr. Conway para el cargo de subsecretario de Estado, volviendo a Edimburgo en 1769.En 1775 fue aquejado de unas dolencias en los intestinos y un año después, temiendo un mal desenlace de la enfermedad.


obras importantes:


ecribió la breve autobiografía Mi vida, una oración funeral a sí mismo.

otras de sus obras mas importantes son las siguientes.

Tratado sobre la Naturaleza Humana
Resumen del Tratado de la Naturaleza Humana
Ensayos morales y políticos
Investigación sobre el entendimiento humano (reelaboración de la primera parte del Tratado)
Investigación sobre los principios de la moral
(reelaboración de la tercera parte del Tratado)
Historia de Inglaterra
Historia natural de la religión
Mi vida (autobiografía)Diálogos sobre la religión natural


su filosofía aplicada a la actualidad:


las instituciones sociales y el estado deriven su legitimidad de la naturaleza de la sociedad, que sean lo que son "por naturaleza", sino que derivan su legitimidad de una convención. La base de tal convención radica en la utilidad que las instituciones reportan a la sociedad, al margen de la cual no tendrían sentido. En ningún caso se puede decir que forman parte "por naturaleza" de la sociedad. Es tan posible la existencia de una sociedad sin gobierno coactivo, como lo es lo contrario. De hecho, la sociedad sin gobierno es el estado "más natural" de los seres humanos, (Tratado, 3, 2, 8), lo que puede comprobarse empíricamente en las tribus de América

Aristóteles


biografia:

Aristóteles nació en Estagira (Macedonia) en el año 384 a.C y falleció en Calcis en el año 322.
En el 367/6, cuando tenía diecisiete años, se trasladó a Atenas sin perder la ciudadanía de Estagira, donde ingresó en la Academia platónica para estudiar. Platón debía tener unos cincuenta años por aquel entonces, y Aristóteles debió ser uno de sus discípulos más brillantes ("el lector" le llamaba Platón).
Su filosofía se caracteriza por ser un movimiento filosófico y científico basado en la experimentación. Concepción revolucionaria. En un panorama filosófico denominado por la ciencia del mundo exterior y la cosmología, creó un concepto de la sociedad, de la realidad y del hombre totalmente diferente.
En el campo de la metafísica - hasta entonces denominado por Platón - en el que tenía predominio las ideas y por lo tanto el mundo ideal y dialéctico de la lógica y el pensamiento sobre la realidad y la experiencia, él decidió crear bases totalmente diferentes para constituir en ellas la filosofía y la ciencia.
Su gran revolución ideológica la hace precisamente en el campo de la teoría del conocimiento. Contra todos los filósofos que presumían la validez del conocimiento, él dice que sin experimentación no hay verdad.
Aristóteles inventa el empirismo, pues considera que todas las filosofías y las ciencias tienen que partir de las experiencias, es decir, de todas las sensaciones que nos ofrece el mundo de la percepción y del conocimiento sensible.


Obras importantes:


En su obra "Organon", desarrolla una lógica y una epistemología que le permiten perfeccionar y alcanzar el conocimiento científico a la vez demostrativo y convalidadamente verdadero.


su obra "Etica de Nicomaco" hizo la primera exposición sistemática de esta disciplina. Considera como cuestión fundamental la del "supremo bien, o sea un bien que se desea por sí mismo y por el cual, a la vez, se desea todos los demás bienes; todos coinciden en que este supremo bien es la felicidad"


su filosofia aplicada a la actualidad:


Creó su lógica para garantizarse un acceso sólido del conocimiento a la realidad. Cambió el curso de la filosofía al pensar que las ideas y los pensamientos no eran como lo creyó Platón. Insertó las ideas en el mundo real, tanto las cosas materiales que se ofrecen al conocimiento sensible, como las ideas y conceptos. Desde entonces las ideas no flotan en vacío ideal sino que existen en las cosas mismas de la realidad. Al mismo tiempo que fue el creador del "empirismo epistemológico", fue también gestor del "realismo metafísico". Hay una realidad exterior que puede ser accesible al conocimiento empírico.

sábado, 6 de diciembre de 2008

Santo Tomás de Aquino



Santo Tomás de Aquino




(1225-1275)


-Biografía:


Santo Tomás de Aquino nació en el castillo de Roccasecca, cerca de Aquino, en el año 1225, en el seno de una numerosa y noble familia italiana. Su padre, Landolfo, descendiente a su vez de los condes de Aquino, estaba emparentado con el emperador Federico II. Su madre, Teodora, era hija de los condes de Taete y Chieti. Recibió Tomás su primera educación, a partir de los cinco años, en la abadía de Montecasino, de la que era abad su tío, permaneciendo en el monasterio hasta 1239, cuando el emperador Federico II decretó la expulsión de los monjes. Allí realizó los estudios ordinarios de gramática, latín, música, moral y religión.
A finales de 1239 se dirigió a la universidad de Nápoles para continuar sus estudios, permaneciendo en dicha ciudad hasta 1244, año en que, sintiéndose atraído por la vida de los frailes dominicos que había conocido en un convento de Nápoles, ingresó en la orden como novicio. La decisión no fue del agrado de su familia, que hubiera preferido que Sto. Tomás sucediera a su tío al frente de la abadía de Montecasino. Enterada de que Sto. Tomás se iba a dirigir a Bolonia para participar en un capítulo general de la orden, y que posteriormente sería enviado a París para continuar sus estudios, fue raptado por sus hermanos y retenido por ellos durante más de un año en el castillo de Roccasecca, con la intención de disuadirlo de su ingreso definitivo en la orden, cosa que no consiguieron dejándole, finalmente, cumplir su voluntad. Se dirigió posteriormente a París, probablemente en el verano de 1245.
En París permaneció hasta 1248, como estudiante, ganándose rápidamente la confianza de San Alberto Magno quien se sintió atraído por las grandes posibilidades intelectuales de su discípulo. En 1248 se dirigió a Colonia, con San Alberto, quien iba a fundar una casa de estudios para la orden.
En Colonia permaneció con él hasta 1252, regresando a París para continuar sus estudios, recibiendo su licenciatura en 1256, siendo nombrado Magister ese mismo año, ocupando su cátedra hasta el 1259.
En 1259 se trasladó a Italia, donde permaneció hasta 1268, con el encargo de enseñar teología en la Corte pontificia . A lo largo de estos años residió en varias ciudades italianas, como Anagni, Orvieto, Roma y Viterbo, siendo invitado a dar conferencias en las universidades de Nápoles y Bolonia. En esta época conoce, entre otros personajes ilustres, a Guillermo de Moerbeke, el famoso traductor de las obras de Aristóteles, quien puso a su disposición varias de sus traducciones, entre ellas algunas que se encontraba prohibidas en la época y que Sto. Tomás comentará, junto con otras obras de Aristóteles como la Física y la Metafísica.
En 1268 regresa a París, impartiendo su magisterio hasta 1272, en medio de numerosas polémicas provocadas tanto por los ataques contra y entre las órdenes religiosas, como por las controversias suscitadas por los averroistas latinos, quienes, encabezados por Siger de Brabante, habían copado la facultad de Artes (filosofía) modificando sustancialmente las enseñanzas aristotélicas que San Alberto y el mismo Sto. Tomás habían anteriormente introducido en dicho facultad. Luego de una polémica actividad regresa a Nápoles el año 1272, con el encargo de establecer una casa de estudios , donde abandona totalmente su actividad docente y de autor, encontrándose frecuentemente arrebatado por experiencias místicas que le absorben por completo. Permanecerá allí hasta 1274, muriendo en el transcurso del viaje iniciado ese año para dirigirse de Nápoles a Lyon, donde iba a celebrarse un concilio convocado por el papa Gregorio X.


Sus obras:


Aunque Santo Tomás vivió menos de cincuenta años, escribió más de sesenta obras, algunas cortas, otras muy largas. Esto no significa que toda la producción auténtica haya sido escrita directamente a mano; le ayudaron secretarios, y sus biógrafos aseguran que podía dictar a varios escribientes a la vez. Le han sido falsamente atribuidas otras obras, que fueron en realidad escritas por sus discípulos.


Las obras mas importantes son:


"De ente et essentia"
- "De principiis naturae"
- "De Veritate"
- "Suma Contra Gentiles".


- "De Potentia"
- "De Malo".
- "De Spiritualibus Creaturis".
- "Sententia super De Anima".


-Su filosofía:


Creó uno de los sistemas filosóficos más completos en la historia del pensamiento occidental; al modo de una catedral gótica, con su arquitectura elegante y racional, espigada hacia el cielo, cada concepto está en el lugar que le corresponde, encaja perfectamente con los demás, los soporta, y en su interrelación da lugar a un modelo del mundo pocas veces igualado por otra filosofía. Claro seguidor de Aristóteles, Santo Tomás logra de un modo sorprendente hacerlo compatible con la doctrina cristiana, razón que sin duda explica el éxito que pronto tuvo en toda la cultura cristiana medieval y moderna. No es menor mérito de Santo Tomás el equilibrio que parece lograr entre la razón y su ejercicio y la fe y su práctica; los dos ámbitos le interesaron, aunque, sin duda, el motor de su extraordinario esfuerzo filosófico fue la experiencia religiosa que siempre le acompañó. Por su relevancia e influencias en la historia de la filosofía y, más aún, por mostrarnos una posibilidad del pensamiento , Santo Tomás es un filósofo imprescindible para todo aquél que se atreva a pensar con radicalidad la vida humana y el mundo


GUILLERMO DE OCKHAM



-Biografia:

Se desconoce la fecha exacta del nacimiento de Guillermo de Ockham, que se situa, entre los años 1280, como pronto, y 1300, como muy tarde. Según unos nació en el lugar llamado Ockham, en el condado de Surrey, al sur de Londres, mientras que otros consideran que Ockham era simplemente su apellido. Se sabe que ingresó muy joven en la orden mendicante de los franciscanos, y que realizó sus estudios en Oxford, debiendo alcanzar el grado de bachiller en los años 1316-20; según unos, alcanzó también el grado de "magister", llegando a enseñar lógica y teología en las escuelas franciscanas hasta el año 1323, en que fue convocado a Aviñon por la corte pontificia, acusado de herejía. Otros, sin embargo, afirman que no consiguió el grado de magister y que jamás se dedicó a la enseñanza, sino que continuó sus estudios en el ámbito de las preocupaciones filosófico-teológicas de la orden franciscana, de donde proceden sus primeros escritos polémicos y críticos sobre tales cuestiones. Todos, sin embargo, están de acuerdo en que fue discípulo de Duns Scoto, lo que implica retrasar casi al máximo la fecha de nacimiento de Ockham

En el año 1323, J. Lutterrell, canciller de la universidad de Oxford, que había acusado a Ockham de herejía, consigue que el papa Juan XXII convoque a éste a la corte papal, entonces en Aviñón, para someterle al interrogatorio pertinente acerca de significado de sus tesis, con el fin de juzgar su ortodoxia o heterodoxia. Durante varios años, en los que permanece como prisionero de la corte, se trata el asunto, que parece terminar con una sentencia benévola por parte del papa, sentencia que no satisface los deseos de Lutterrell. Los acontecimientos políticos que tuvieron lugar entonces, entre el excomulgado emperador Luis de Baviera y el papa Juan XXII a raíz de la disputa sobre la prevalencia del poder terrenal o del poder espiritual, provoca la intervención de Guillermo de Occam en la disputa, la misma que los franciscanos mantenían ya con el papado al respecto.

En 1327 es encargado por el general de la orden, Miguel de Cesena, a analizar las tesis pontificias sobre el tema; viéndose amenazados ambos por los defensores de las tesis papistas abandonan Aviñón y se refugian primero en Italia y luego, en 1328, bajo la protección de Luis de Baviera, siendo también ambos excomulgados. Tras la muerte de Luis de Baviera, en 1347, y habiendo continuado su polémica con los papas Benedicto XII y Clemente VI, tuvieron lugar algunos contactos para facilitar la sumisión de Ockham al papa Clemente VI, sin que haya constancia de que la hubiera, o no, firmado. En 1349 muere en Munich, al parecer a causa de la peste negra.

La presencia de Ockham en Aviñón marca un antes y un después en el conjunto de su obra que queda así dividida en torno a dos períodos; el primero, anterior a su estancia en Aviñón, está dominado por preocupaciones filosófico-teológicas; el segundo, que comienza con su huída de Aviñón, por reflexiones filosófico-políticas. Pertenecen al primer período los "Comentarios" a las Sentencias de Pedro Lombardo, cuyo contenido le valió la antipatía y persecución de Luterrell, y el ser acusado de herejía. También la "Expositio super octo libros physicorum" y la "Summa totius logicae" fueron escritas antes de 1327, sobre filosofía natural el primero y sobre lógica el segundo. Entre las obras teológicas cabe destacar los "Quodlibeta VII", con el tratamiento de cuestiones como la unicidad de Dios, la posibilidad o no, defendida por Sto. Tomás, de que el alma sea la forma del cuerpo, la posibilidad de demostrar la existencia de Dios, etc... en consonancia con las posiciones mantenidas en los Comentarios.
Al segundo período pertenecen su obras de polémica filosófica-política, centradas en torno a la discusión de la prevalencia del poder terrenal o espiritual, entre las que cabe destacar el "Compendium errorum Ioannis papae XXII" y el "Dialogus inter magistrum et discipulum de imperatorum et pontificum potestate", a la que se considera la principal obra de este período escrita por Ockham.
-Su Filosofia:
En cierta forma, se podría decir que toda la filosofía de Guillermo de Ockham bascula en torno a una idea expresada en la primera frase del credo cristiano: “Creo en Dios todopoderoso”. La omnipotencia divina será, así, el primero de sus grandes presupuestos, lo que le obliga a romper con toda la filosofía escolástica de corte neoplatónico, pero también con la tomista. Para Ockham no pueden existir ideas, esencias o formas, que limiten el poder creador de Dios. Lo único que Dios no puede crear es lo contradictorio por imposible: Dios no puede crear, por poner un ejemplo, un círculo cuadrado, pues eso es contradictorio en sí mismo. La omnipotencia no puede ir en contra de las leyes esenciales de la lógica o de la matemática, pues estas están basadas en la coherencia y en la ausencia de contradicción.

Así de un dogma puramente teológico (omnipotencia divina) se derivará una consecuencia en principio inesperada, pero tremendamente moderna: la negación de las esencias, que es precisamente el nervio central del nominalismo. En cada criatura manifiesta Dios su poder de creación y la diversidad la entiende Ockham como una manifestación del poder creador de Dios, que no puede verse constreñido por ningún tipo de Idea que exista separada de la realidad, o por esencias o formas que están dentro de cada individuo. La creación es una muestra del capricho de Dios, de su acto de creación y originalidad extremos. Dios se recrea en cada criatura, siendo capaz de dar la existencia a una cantidad enorme de seres absolutamente diferentes, particulares, exclusivos. Cada realidad existente es única e irrepetible, lo que sería un signo, a juicio de Ockham, de la omnipotencia divina. Las consecuencias no sólo serán importantes para su metafísica, sino que, como veremos al final, se dejarán sentir también en su ética.
-Aplicaciones actuales a su filosofia:
Circula desde hace tiempo una historia, que bien puede ser verdad o simplemente una leyenda urbana, referida a los problemas que encontraron los primeros astronautas para escribir en condiciones de gravedad cero. Según dicha historia, en plena carrera espacial, la NASA se encontró con el inconveniente de que los bolígrafos normales no podían escribir en el vacío. Ante esa tesitura, decidieron encargar a la empresa Fisher un bolígrafo que fuera capaz de escribir en condiciones de ingravidez, para lo que invirtieron más de 1,5 millones de dólares de la época.
El proyecto fue todo un éxito. El denominado cómo “El Bolígrafo de los Astronautas” era capaz de escribir en cualquier posición, convirtiéndose desde entonces en un elemento imprescindible en todas las misiones espaciales estadounidenses.
Años después, cuando la carrera espacial ya había terminado, y las relaciones entre las 2 superpotencias estaban algo más normalizadas, un alto cargo de la NASA le preguntó a un colega soviético qué habían hecho ellos para resolver el problema de los bolígrafos en el espacio, a lo que el ruso, extrañado por la pregunta, simplemente respondió: Nosotros usamos lápices.
Esta historia es perfecta para ilustrar uno de los principios filosóficos más simples, y a la vez, más importantes: “En igualdad de condiciones, la solución más sencilla es probablemente la correcta”.
Esta máxima fue escrita por Guillermo de Ockham, un fraile franciscano inglés, a finales del siglo XIV. Conocida como
La Navaja de Ockham, (también como el principio de la economía o de parsimonia), forma la base del reduccionismo metodológico, y ha sido una regla básica para el desarrollo de la Ciencia y la Filosofía, con aplicaciones en campos tan dispares como la Lógica, la Teología, la Lingüística o la Economía, aunque encuentra su mayor utilidad en el día a día, especialmente por aquellas personas con tendencia a complicarse la vida.



-Obras importantes:

Scriptum in quatuor libros Sententiarum. Contiene el Ordinatio y Quaestiones in II, III, IV Sententiarum (1318 - 1323).
Expositio aurea super totam artem veterem: Expositio super Porphyrium; Expositio super Librum Praedicamentorum; Expositio super duos Libros Perihermeneias; Expositio super duos Libros Elenchorum (después de 1318).
Tractatus de praedestinatione et praescientia Dei et de futuris contingentibus (1318 - 1323).
Logica maior o Summa logicae (1324 - 1328).
Elementarium logicae o Logica media.
Logicae tractatus minor.
Quaestiones in octo libros physicorum, (antes de 1327, probablemente 1324).
Philosophia naturalis sive summulae in octo libros physicorum, (1324).




jueves, 4 de diciembre de 2008

DESCARTES


René Descartes (1596-1650)

Biografía

Descartes nació el 31 de marzo de 1596 en La Haye, en la Turena francesa. Pertenecía a una familia de la baja nobleza, siendo su padre, Consejero en el Parlamento de Bretaña. La temprana muerte de su madre, pocos meses después de su nacimiento, le llevará a ser criado en casa de su abuela materna, a cargo de una nodriza a la que permanecerá ligado toda su vida. Posteriormente hará sus estudios en el colegio de los jesuitas de La Flèche, hasta los dieciséis años, estudiando luego Derecho en la Universidad de Poitiers. Según la propia confesión de Descartes, tanto en el Discurso del método como en las Meditaciones, las enseñanzas del colegio le decepcionaron, debido a las numerosas lagunas que presentaban los saberes recibidos, a excepción de las matemáticas, en donde veía la posibilidad de encontrar un verdadero saber.
Esta muestra de escepticismo, que Descartes presenta como un rasgo personal es, sin embargo, una característica del pensamiento de finales del siglo XVI y principios del XVII, en los que el pirronismo ejerció una notable influencia. Terminados sus estudios Descartes comienza un período de viajes, apartándose de las aulas, convencido de no poder encontrar en ellas el verdadero saber:
Después de sus estudios opta, pues, por la carrera de las armas y se enrola en 1618, en Holanda, en las tropas de Maurice de Nassau, príncipe de Orange. Allí conocerá a un joven científico, Isaac Beeckman, para quien escribe pequeños trabajos de física, como "Sobre la presión del agua en un vaso" y "Sobre la caída de una piedra en el vacío", así como un compendio de música. Durante varios años mantienen una intensa y estrecha amistad, ejerciendo Beeckman una influencia decisiva sobre Descartes, sobre todo en la concepción de una física matemática, en la que había sido instruido por Beeckman. Continúa posteriormente sus investigaciones en geometría, álgebra y mecánica, orientado hacia la búsqueda de un método "científico" y universal.
En 1619 abandona Holanda y se instala en Dinamarca, y luego en Alemania, asistiendo a la coronación del emperador Fernando en Frankfurt. Se enrola entonces en el ejército del duque Maximiliano de Baviera. Acuartelado cerca de Baviera durante el invierno, pasa su tiempo en una habitación calentada por una estufa, donde elabora su método, fusión de procedimientos lógicos, geométricos y algebraicos. De esa época será la concepción de la posibilidad de una matemática universal (la idea de una ciencia universal, de un verdadero saber) y se promete emplearla en renovar toda la ciencia y toda la filosofía.
La noche del 10 de noviembre de 1619 tiene tres sueños sucesivos que interpreta como un mensaje del cielo para consagrarse a su misión filosófica. La importancia que concede Descartes a estos sueños choca con las características que se le atribuyen ordinariamente a su sistema (racionalismo), pero según el mismo Descartes nos relata, estarían en la base de su determinación de dedicarse a la filosofía, y contendrían ya la idea de la posibilidad de fundamentar con certeza el conocimiento y, con ello, reconstruir el edificio del saber sobre cimientos firmes y seguros. Habiéndose dotado con su método de una moral provisional, renuncia a su carrera en el ejército. De 1620 a 1628 viaja a través de Europa, residiendo en París entre los años 1625-28, dedicando su tiempo a las relaciones sociales y al estudio, entablando amistad con el cardenal Bérulle, quien le animará a desarrollar sus teorías en afinidad con el catolicismo. Durante este período se ejercita en su método, se libera de los prejuicios, acumula experiencias y elabora múltiples trabajos descubriendo especialmente en 1626 la ley de refracción de los rayos luminosos. También en esta época redacta las "Reglas para la dirección del espíritu", obra inacabada que expone lo esencial de su método.
En 1628 se retira a Holanda para trabajar en paz. Permanecerá allí veinte años, cambiando a menudo de residencia, completamente ocupado en su tarea filosófica. Comienza por componer un pequeño tratado de metafísica sobre el alma y Dios del que se dice satisfecho y que debe servir a la vez de arma contra el ateísmo y de fundamento de la física. Dicho tratado contendría ya las ideas fundamentales de lo que serían posteriormente las "Meditaciones metafísicas", según algunos estudiosos del cartesianismo, opinión no compartida por otros, que creen demasiado temprana la fecha como para que Descartes estuvisese ya en posesión de su metafísica.
Interrumpe la elaboración de dicho tratado para escribir en 1629 un "Tratado del mundo y de la luz" que acaba en 1633 y que contiene su física, de caracter mecanicista. Pero, habiendo conocido por azar la condena de Galileo por haber sostenido el movimiento de la tierra (que también sostenía Descartes), renuncia a publicar su trabajo. Por una parte no quiere enfrentarse con la Iglesia a la cual está sometido por la fe. Por otra, piensa que el conflicto entre la ciencia y la religión es un malentendido. En fin, espera que un día el mundo comprenderá y que podrá editar su libro. Este "miedo" de Descartes ante la condena de Galileo ha llevado a algunos estudiosos a buscar en su obra un significado "oculto", llegando a interpretar la demostración de la existencia de Dios que realiza en las Meditaciones como un simple ejercico de prudencia, que no se correspondería con el "auténtico" pensamiento cartesiano sobre la cuestión. Para difundir su doctrina mientras tanto publica resúmenes de su física, precedidos por un prefacio. Es el famoso "Discurso del método", seguido de "La Dióptrica", los "Meteoros" y "La Geometría", que sólo son ensayos de este método (1637). El éxito le conduce a dedicarse completamente a la filosofía. Publica en 1641, en latín, la "Meditaciones sobre la filosofía primera", más conocida como Las Meditaciones metafísicas, que somete previamente a los grandes espíritus de la época (Mersenne, Gassendi, Arnauld, Hobbes...) cuyas objeciones seguidas de respuestas serán publicadas al mismo tiempo. En 1640 muere su hija Francine, nacida en 1635, fruto de la relación amorosa mantenida con una sirvienta. En 1644 publica en latín los "Principios de la filosofía". La publicación de estas obras le proporciona a Descartes el reconocimiento público, pero también es la causa de numerosas disputas.
En 1643 conoce a Elizabeth de Bohemia, hija del elector palatino destronado y exiliado en Holanda. La princesa lo adopta como director de conciencia, de donde surgirá una abundante correspondencia en la que Descartes profundiza sobre la moral y sobre sus opiniones políticas y que le conducen en 1649 a la publicación de "Las pasiones del alma", más conocida como el Tratado de las pasiones, que será la última obra publicada en vida del autor y supervisada por él.
Posteriormente realiza tres viajes a Francia, en 1644, 47 y 48. Será en el curso del segundo cuando conozca a Pascal. Su fama le valdrá la atención de la reina Cristina de Suecia. Es invitado por ella en febrero de 1649 para que le introduzca en su filosofía. Descartes, reticente, parte sin embargo en septiembre para Suecia. El alejamiento, el rigor del invierno, la envidia de los doctos, contraría su estancia. La reina le cita en palacio cada mañana a las cinco de la madrugada para recibir sus lecciones. Descartes, de salud frágil y acostumbrado a permanecer escribiendo en la cama hasta media mañana, coge frío y muere de una neumonía en Estocolmo el 11 de febrero de 1650 a la edad de 53 años.


Obras

1637.Discurso del método, seguido de la Dióptrica, los Meteoros y la Geometría
1641. Primera edición en latín de las "Meditaciones metafísicas" se incluyen sólo las seis primeras series de objeciones y respuestas.
1642. Segunda edición en Amsterdam, en las que se incluyen las séptimas objeciones y la carta al P. Dinet.
1643. "Epistola Renati Descartes ad celeberrimum virum D. Gisbertum Voetium" en la que Descartes responde a un escrito denigratorio editado por Voetius.
1644. Primera edición de los "Principios de la filosofía, obra dedicada a Elisabeth de Bohemia.
Edición en latín del Discurso del método con la Dióptrica y los Meteoros, pero no la Geometría
1647. Las Meditaciones. Se incluyen las respuestas a las primeras, segundas, terceras, cuartas y sextas objeciones.
Les principes de la philosophie, primera edición en francés, en París, se añade una carta prefacio.
1649. El Tratado de las pasiones.
Obras publicadas tras la muerte de descartes
El principal editor de Descartes es su cuñado Claude Clerselier. A la muerte de Descartes en Estocolmo el embajador de Francia Hector-Pierre Chanut se hace cargo de sus escritos, que envía a Clerselier, quien procede a editar algunas de sus obras y gran parte de su correspondencia:
1657. Lettres de Descartes, editadas por Charles Angot y Henri Le Gras, en París. Un segundo volumen será editado en 1659, con traducciones más o menos afortundas de su correspondencia en latín.
1664. El Tratado del hombre; y el "Traité de la formation du foetus", ambas editadas por Charles Angot y Théodore Girard.
1667. Le Monde, según el texto original, editado por Michel Bobin y Nicolas Le Gras, junto a una nueva edición del Tratado del hombre .
1668. Ediciones del "Tratado de mecánica" y del "Tratado de música", así como de nuevas entregas de la correspondencia cartesiana, a cargo de varios editores.
El resto de las obras inéditas de Descartes se publicaron esporádicamente a lo largo de los siglos XVIII y XIX, culminando en la edición de sus obras completas por Charles Adam y Paul Tannery entre los años 1897 y 1909, convertida en la obra de referencia de la bibliografía cartesiana.


Filosofía

La idea de que es necesario un método para dirigir bien la razón y alcanzar el conocimiento no es estrictamente hablando una elaboración propia y exclusiva de Descartes. Al menos debe compartir el mérito de tal creación con Bacon y Galileo. No obstante, es tan particular el uso que Descartes hace del método, y tal la influencia que ejercerá en la constitución de su pensamiento filosófico, que la asociación del problema del método con la filosofía cartesiana está plenamente justificada.
El humanismo había conseguido imponer una nueva percepción del hombre asociada a la necesidad de recuperar el saber clásico. Sin entrar en una confrontación frontal con la iglesia, y sin desmarcarse de los principales elementos del dogma, había resaltado el papel del hombre y la necesidad de considerarlo el objeto fundamental de la creación
La idea de que el método que utilizaba la escolástica había fracasado se había extendido poco a poco por toda Europa.
Descartes Comparte la idea de que la naturaleza es una realidad dinámica con estructura matemática. Comparte también la necesidad de la existencia del método dado el fracaso de los métodos anteriores en el conocimiento de la verdad. Pero tiene una interpretación distinta del significado de las matemáticas. Para Descartes el éxito de las matemáticas radica no en su estructura que hoy denominaríamos axiomática, sino en el método que utiliza. Y ese método es un método deductivo. Si el conocimiento de la naturaleza es posible gracias a las matemáticas es pensable que utilizando el método que utiliza las matemáticas se pueda alcanzar la verdad y la certeza en el conocimiento de los otros aspectos de la realidad.
Descartes, por lo tanto, comparte con Bacon y con Galileo la necesidad del método para conocer la realidad. Las críticas que Bacon y Galileo realizan a la escolástica son similares a las que realiza Descartes. El fracaso de los métodos silogísticos, el fracaso de la física aristotélica, hacen necesario un nuevo método para interpretar la realidad. Ello supone la confianza en la razón que ha ido ganando su autonomía en el paso del siglo XVI al XVII. El nuevo método además ha de tener capacidad para descubrir, no basta un método que tengan carácter meramente explicativo, que sirva para exponer o para comunicar un conocimiento. No se trata de transmitir un saber acumulado a través de la historia, sino de descubrir, de inventar. Dado que para Descartes el éxito de las matemáticas radica en la utilización de un método, parece quedar claro que el conocimiento de la verdad debe ir asociado a la utilización de un método.


Su filosofía en la actualidad

La primera repercusión importante del pensamiento de Descartes hay que buscarla en su punto de partida: su filosofía es una filosofía de la conciencia. Descartes se recluye en la soledad de su conciencia para contestar a la pregunta que inaugura la modernidad: )qué puedo conocer? Se trata, pues, de descubrir la verdad de los contenidos de la conciencia.

Esto nos plantea el problema de la objetividad de tales contenidos: )son las cosas como se nos aparecen en la conciencia? Este problema se desdobla a su vez en dos:

Somos como creemos ser? Descartes contesta afirmativamente: sabemos que somos cosas o seres pensantes, no podemos equivocarnos en cuanto al conocimiento que, como seres pensantes, tenemos de nosotros mismos. Así los contenidos verdaderos de nuestro pensamiento son aquellos de los que somos conscientes de una forma clara y distinta. Pero supongamos que nos preguntan qué sentimos por una persona y contestamos que la apreciamos muchísimo, )no podría darse el caso de que creamos que es así, pero que en el fondo, y sin ser conscientes de ello, no nos caiga nada bien e incluso la odiemos? Aquí nos habríamos apartado del planteamiento cartesiano: los verdaderos contenidos de nuestro pensamiento podrían no ser aquellos de los que somos conscientes, sino precisamente aquellos otros de los que no lo somos. Cabría la posibilidad de que lo que somos no se corresponda con lo que creemos ser. Este es el camino emprendido por las llamadas Afilosofías de la sospecha: el psicoanálisis, el marxismo y la filosofía de Nietzsche.

Es el mundo que nos rodea como creemos que es? Descartes también responde afirmativamente, basándose el la idea de que Dios ha hecho acordes las leyes de nuestro pensamiento y las de la realidad. Existe una armonía entre el ser y el pensar que constituye el fundamento de toda filosofía idealista y que se ve corroborada en la concepción galileana, y más tarde newtoniana, de que el mundo es descriptible en términos matemáticos. Esta idea se mantiene en la actualidad de múltiples formas, lo único que varía de una corriente a otra es el fundamento de dicha armonía .

Respecto al problema de la intersubjetividad de los contenidos de la conciencia, Descartes considera que, puesto que todas las conciencias funcionan del mismo modo, lo que nos aparece como evidente será válido para todos los seres conscientes. La respuesta a esta cuestión es, sin embargo, negativa para posiciones como la del escepticismo de Hume o el relativismo cultural (que, desde sus orígenes en el siglo XIX hasta hoy, considera el reconocimiento de algo como verdadero o falso depende de cada cultura) ya que niegan la posibilidad de alcanzar verdades universalmente válidas. En esta línea, una de las principales corrientes filosóficas contemporáneas, la Hermenéutica, ha señalado que la conciencia no está aislada, sino que está situada históricamente y condicionada por el lenguaje; por tanto, los prejuicios son constitutivos del conocimiento y la razón no es pura, pues cuando conocemos no podemos eliminar los factores sociales, culturales, sentimentales, lingüísticos, etc. Interpretamos siempre desde un horizonte de sentido al que pertenecemos.


Por otra parte, Descartes considera que el error nace del asentimiento de la voluntad a ideas que no están del todo claras, es decir, cuando admitimos como verdadero algo que no es indubitable. El error es fruto entonces de la voluntad. Para estar en la verdad, para asentir al pensamiento verdadero, es menester la adhesión de la voluntad. En otras palabras: para alcanzar la verdad, hay que tener voluntad de verdad. El reconocimiento de la Avoluntad de verdad como condición fundamental de la verdad teórica anticipa los requisitos morales de las modernas teorías consensuales de la verdad, como la de Apel y Habermas Además, al considerar Descartes que el error está en la precipitación que cometemos al admitir algo como verdadero (en la voluntad), se pone de manifiesto que el racionalismo tiene una confianza en el poder ilimitado de la razón, confianza que pervive en el Aespíritu científico de nuestra civilización occidental.

De especial interés es el de la principalidad que otorga Descartes a la razón frente a los sentidos. Los pensadores empiristas remarcarán el peso de la experiencia en los procesos de conocimiento; pero con Kant se creará una síntesis que establece tanto el peso de la razón como el peso de la experiencia. En los inicios del siglo XX el punto de vista empirista se exalta de nuevo con el neopositivismo. Para esta corriente de pensamiento cualquier enunciado analítico determina su verdad por medios lógicos o matemáticos; pero para el resto de enunciados, de los que se supone que son sintéticos y, por tanto informativos, se precisa de un criterio que determine cuáles de ellos cumplen con la exigencia de decir verdaderamente algo acerca de la realidad o experiencia: tal criterio se denominó principio de verificación, que identificaba verificabilidad de un enunciado y significado del mismo. Por otra parte, en nuestros días, la racionalidad es una exigencia en muchos ámbitos, no sólo en el campo de la filosofía, sino también en el de las ciencias: se exige, por ejemplo, racionalidad en los planteamientos económicos y políticos.

El modelo explicativo del conocimiento de la realidad del que parte Descarte puede ser considerado como idealista, si tenemos en cuenta que parte de la existencia de la conciencia como primer principio indudable a partir del cual deriva (de una forma poco convincente) la existencia del mundo. Otorga una primacía al sujeto del conocimiento, que abrirá paso a posteriores concepciones idealistas de la realidad, como las de Kant, Hegel o Husserl.

La metafísica cartesiana es claramente dualista: establece dos realidades heterogéneas entre sí (materia y espíritu, extensión y pensamiento) que plantean el problema de su relación recíproca. Esa diferencia es la base de la distinción entre ciencias de la naturaleza y ciencias del espíritu (aunque también puede mantenerse sin caer en el dualismo metafísico) de la que deriva la cuestión de si la metodología de las ciencias naturales es aplicable al estudio del ser humano y la sociedad. Por otra parte, la conveniencia de un método para que nuestra razón avance en la investigación que emprendemos, es algo que también forma parte del legado intelectual que todos hemos heredado de Descartes.

Esta metafísica también plantea el problema antropológico de la relación entre alma y cuerpo, en su versión contemporánea entre el pensamiento (o mente) y el cuerpo. Aunque actualmente algunos autores, como J. Eccles, han sostenidos posiciones dualistas (dualismos interaccionista), desde finales del siglo XIX han predominado las teorías monistas que consideran que los procesos mentales se explican únicamente por su base materias, localizada en el cerebro. El materialismo fisicalista ha sostenido que los procesos mentales son meros procesos fisicoquímicos o neurofisiológicos, reduciendo todo lo mental al plano físico. Otras posiciones monistas menos radicales, como el emergentismo de M.Bunge o J. Searle, que consideran que no podemos identificar los estados mentales con los físicos, aunque los procesos mentales son procesos que acaecen en el cerebro (lo mental emerge de lo físico).

Este problema también está en conexión con otro derivado del mecanicismo que regula los procesos materiales: )cómo es posible la libertad humana en un universo determinista regido por leyes inmutables?

Como hemos visto, Dios es la clave del sistema cartesiano. Cuando la razón en la modernidad entienda ilegítimo el paso de la idea de Dios a un Dios existente se concebirá un Dios ajeno a la religión y al hombre: el Dios del deísmo en la Ilustración. Y también, más tarde, la filosofía desde la autosuficiencia de la razón desembocará en diversas formas de ateísmo.
Mantienen la necesidad del diálogo como marco para ir descubriendo cooperativamente la verdad (frente a la tesis cartesiana de que la verdad se puede hallar en la intimidad de la conciencia); el objetivo es que las personas lleguen, en una situación libre de coacciones, a un consenso acerca de lo que es verdadero.
El idealismo subraya que la realidad no existe independientemente del sujeto que la conoce, cosa que no hace Descartes. Sin embargo, el recurso a la veracidad divina para afirmar la existencia del mundo exterior -que pronto será tenido como invalido- lo conducen a un idealismo al menos formalmente.

Platón (Discípulo de Sócrates)


Platón
(428-347 a Xto)
-Biografía:
Nació en Atenas probablemente en el año 427 a.C. pertenecía a una familia noble y eran ilustres tanto los ascendientes de sus padres como los de su madre recibió la educación física intelectual de los jóvenes de su época; es posible que haya seguido las lecciones del heraclitano Cratilo. En el año 407 sobrevino el acontecimiento capital de la vida de Platón: su encuentro con Sócrates. El maestro tenía entonces 63 y el alumno 20. Platón debió seguir las lecciones de Sócrates durante ocho años. Poco después de la caída de los Treinta, tres delatores acusan a Sócrates de corromper a la juventud y de no creer en los dioses de la ciudad; condenado a muerte, rehúsa evadirse y bebe la cicuta en el 399. Platón no estuvo presente en los últimos momentos de su maestro, relatados en el Fedón; pero esta escandalosa injusticia debió ser para él el prototipo del acto inicuo contra cuya repetición debía luchar todo filósofo.
Puesto que corría el riesgo de ser molestado por su condición de alumno de Sócrates, se refugió Platón enseguida con alumnos, amigos, en Mégara; allí una célebre escuela los acogió en ella entraron en relación con Euclides el Megálico. No se sabe con certeza cuál fue la duración de su estada en Atenas pero alcanzó presumiblemente a tres años. De ahí Platón partió para Africa; se detuvo en Egipto, luego en Cirenaica, donde frecuentó a Aristipo de Cirene y el matemático Teodoro. En este lugar los biógrafos de Platón dan diversas versiones de el orden de sus viajes. Para unos habría regresado directamente a Atenas; para otros se habría dirigido a Italia meridional con el fin de conocer a los pitagóricos y en particular a Arquitas de Tarento.
Alrededor del año 388 abandona Italia para dirigirse a Sicilia. Allí, en Siracusa, reina un Griego de modesto origen, Dionisio I el Anciano, quien tiene en jaque a los cartagineses y se ha convertido en el amo absoluto de Sicilia. Su carta es fastuosa; los vicios que en ella reinan, numerosos; mas Dionisio es célebre. Platón intima con Dion, hermano político de Dionisio, quien tiene pretenciones de filósofo y admira a los Socráticos.
El filósofo permaneció en Atenas y debió de morir allí alrededor del 347 a.C.
En este período final de su vida continuó al frente de la Academia.
- Obras importantes:
Para la autenticación de los escritos platónicos se dispone de criterios externos: una obra se tiene por auténtica si Aristóteles o Ciserón la atribuyen al filósofo, o si se hallan citas de una obra en el interior de otra. También hay criterios internos: un escrito será adjudicado a Platón si "armoniza" con su filosofía; sin embargo, se advierten los peligros dem tal procedimiento, que consiste en definir primeramente a Platón para poder juzgar los trabajos después. Otros críticos han utilizado el método estilométrico, que consiste en medir la frecuencia con que aparecen ciertas palabras griegas corrientes para determinar un "estilo" de Platón que permita autenticar una obra según la forma en que ha sido escrita. Pero debe observarse que el estilo no es dato inmutable en un hombre que vivió cerca de ochenta años.
Apología de Sócrates
Banquete
Crátilo
Critón
Eutidemo
Eutifrón
Fedón
Fedro
Gorgias
Hipias Mayor
Hipias Menor
Ion
Laques
Lisis
Menéxeno
Menón
Protágoras
La República
-Su filosofía:
Lo eterno y absoluto. Este es el tema que ocupó al gran discípulo de Sócrates. Platón sintió la fascinación por un tipo de realidad a la que desde lo mas íntimo de nuestro ser aspiramos. Profundamente insatisfechos en nuestra condición de "prisioneros de la caverna" aspiramos a otra vida más plena y afín a nuestro ser esencial. El mundo eterno de las Ideas será el fundamento objetivo, "alimento de las alas de nuestra alma", como nos dice Platón en Fedro, en que el que nuestra Razón debe sustentarse para alcanzar los tres grandes propósitos de la vida: la Verdad, el Bien (que para Platón se cifra en el bien individual y social) y la Belleza.
Recogiendo el testigo de Sócrates, y en clara oposición a los sofistas, Platón defiende en sus "Diálogos" una de las teorías filosóficas más completas e influyentes. Para destacar la importancia del maestro de Arístóteles, Whitehead afirmó que la filosofía occidental no es más que una serie de notas a pie de página de las obras de Platón. Este juicio es exagerado pero indica muy bien la extraordinaria importancia que tiene la filosofía de Platón en la historia del pensamiento occidental. Con su estilo literario genial e inconfundible, nos ofrece Platón en sus "Diálogos" uno de los sistemas filosóficos más originales de la antiguedad; su influencia se puede rastrear en muchas de las filosofías posteriores y llega incluso hasta doctrinas tan importantes en el siglo XX como la fenomenología.
-Aplicaciones actuales a su filosifía:

El centro de la filosofía de Platón lo constituye su teoría de las formas o de las ideas. En el fondo, su idea del conocimiento, su teoría ética, su psicología, su concepto del Estado y su concepción del arte deben ser entendidos a partir de dicha perspectiva.
Platón estaba persuadido de que el conocimiento se puede alcanzar. También estaba convencido de dos características esenciales del conocimiento. Primera, el conocimiento debe ser certero e infalible. Segunda, el conocimiento debe tener como objeto lo que es en verdad real, en contraste con lo que lo es sólo en apariencia. Ya que para Platón lo que es real tiene que ser fijo, permanente e inmutable, identificó lo real con la esfera ideal de la existencia en oposición al mundo físico del devenir. Una consecuencia de este planteamiento fue su rechazo del empirismo, la afirmación de que todo conocimiento se deriva de la experiencia. Pensaba que las proposiciones derivadas de la experiencia tienen, a lo sumo, un grado de probabilidad.
No son ciertas. Más aun, los objetos de la experiencia son fenómenos cambiantes del mundo físico, por lo tanto los objetos de la experiencia no son objetos propios del conocimiento.
Algunas de estas opiniones están bien fundamentadas y otras no, pero ninguna de ellas debe ser entendida como conocimiento verdadero. El punto más alto del saber es el conocimiento, porque concierne a la razón en vez de a la experiencia. La razón, utilizada de la forma debida, conduce a ideas que son ciertas y los objetos de esas ideas racionales son los universales verdaderos, las formas eternas o sustancias que constituyen el mundo real.